¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por el aumento de la glucosa en sangre. La glucosa es un glúcido el cual hace el principal aporte de la energía que nuestro cuerpo necesita para funcionar. La obtenemos de los alimentos a través de la digestión, en un proceso por el que la glucosa pasa a la sangre y se almacena en el hígado para ser utilizada cuando la necesitemos. Para que las células de nuestro cuerpo puedan utilizar la glucosa es imprescindible la insulina, una hormona que fabrica el páncreas. Algunas personas tienen dificultad para producir o utilizar correctamente la insulina y por lo tanto se produce una acumulación de la glucosa en la sangre que da lugar a la diabetes.
¿Qué tipos hay?
Diabetes tipo 1
Aparece más frecuentemente en niños/as o personas menores de 40 años y se caracteriza porque el páncreas deja de fabricar la insulina. Suele tener un comienzo muy brusco con muchos síntomas. La persona suele empezar a beber mucho, a tener un exceso de orina, mucha hambre y en la mayoría de casos a perder peso
Diabetes tipo 2
Aparece más frecuentemente a partir de los 45 años. Es el tipo de diabetes más frecuente, suele afectar al 85-90% del total de personas con diabetes. Se caracteriza porque, aunque el páncreas produce insulina (en la mayoría de los casos en cantidades superiores a lo normal), el organismo no es capaz de utilizarla de modo eficaz. El 80% de las personas que padecen diabetes tipo 2 tiene sobrepeso u obesidad y no suele practicar ejercicio físico de forma habitual. Este tipo de diabetes no suele presentar síntomas al principio, por lo que la persona puede estar varios años padeciéndola sin saberlo. A pesar de esto, un gran número de personas con diabetes tipo 2 puede mantener su glucosa controlada gracias a unas pautas de alimentación aconsejadas por sus respectivos médicos.
Diabetes gestacional
Cabe mencionar la diabetes gestacional, conocida también como “Diabetes del embarazo”. Suele darse en mujeres que antes del embarazo no tenían diabetes, y en la mayoría de ellas desaparece poco después del parto. No obstante, muchas de las mujeres con diabetes gestacional pueden llegar a desarrollar una diabetes tipo 2 a lo largo de los años.
¿Por qué se produce la diabetes tipo 2?
En el 95% de los casos no se conoce exactamente la causa, aunque sí se sabe que existen algunos factores que pueden favorecer el desarrollo de diabetes. Estos factores se denominan factores de riesgo y la mayoría se pueden disminuir o evitar. Estos son fumar, el exceso de peso, la falta de ejercicio físico, alteraciones en el colesterol e hipertensión arterial.
Sin embargo, hay otros factores genéticos que influyen en la probabilidad de tener diabetes, como la edad (a mayor edad, más probabilidades), haber padecido diabetes gestacional y tener antecedentes familiares con diabetes.
¿Cómo sabemos si tenemos diabetes?
Las personas con diabetes tipo 2 pueden no llegar a presentar ningún síntoma, es por eso recomendable realizarse una analítica de sangre cada dos años. En la cual podemos ver si tenemos diabetes según los datos. De esta manera tendremos diabetes si:
- El nivel de glucosa es mayor de 126 mg/dl tras 8 horas de ayuno. Este es el método que se realiza en primer lugar.
-La glucosa es mayor de 200 mg/dl a las dos horas de haber tomado un zumo de 250 ml, que contiene 75 g de glucosa, y la persona haber permanecido entre 10-12 horas en ayuno. Este método se conoce como Curva de Glucemia, y se realiza cuando el médico tiene dudas porque la glucemia en ayunas presenta unos valores entre 95 y 125 mg/dl. Además, gracias a este podemos ver si una persona se encuentra en una fase de prediabetes, que se da cuando su nivel de glucosa de sangre es entre 140 y 199 mg/dl.
¿Cómo se mide la glucosa?
Para medir el nivel de glucosa se utiliza una tira de gran importancia, ya que en ella se produce una reacción química con la gota de sangre. Siguiendo este proceso:
1.La sangre se deposita sobre el extremo de la tira, que por capilaridad, es absorbida hasta el conducto interior de la misma, donde se encuentra el reactivo (las enzimas).
2.Un micro voltaje se aplica sobre la tira desde el medidor y activa la reacción química de sangre y enzimas.
3.La enzima de la tira se une con la glucosa oxidándola, fruto de cuya reacción se desprenden electrones.
4.Esos electrones son medidos por varios electrodos de la tira y generan una micro corriente eléctrica, que es enviada al medidor.
Por tanto, nos encontramos entonces con un micro voltaje eléctrico que recibe el medidor y que debe interpretar. Para ello, unos algoritmos implementados en el software del aparato lo que hacen es relacionar a cada corriente medida un valor de glucosa. Para entendernos, y sin que las cifras signifiquen nada, podríamos decir que si el medidor recibe 1 de voltaje, eso significa 100 de glucosa. Si recibe 3, 300. Y si recibe 0,5, serían 50. Es decir, correlaciona el voltaje recibido con unos valores de glucosa.
Sin embargo, hay algunos factores que pueden hacer que el medidor falle, estos son el volumen de la gota, y otras sustancias que pueden intervenir en la reacción química de la tira y alterar el resultado. Por ejemplo, la maltosa y galactosa pueden interpretarse como glucosa. También sustancias comunes como vitamina C, paracetamol, ácido acetilsalicílico, hiperuricemia… pueden dar resultados alterados. Por eso en los últimos años, los fabricantes han conseguido discriminar la reacción química mejorando el voltaje aplicado, de tal modo que sólo será medida la carga eléctrica generada por la glucosa. Antiguamente, el hematocrito (nivel de glóbulos rojos en sangre) también causaba grandes problemas, ya que valores anormalmente altos, o bajos, causaban errores al medir el nivel de glucosa