La Celiaquía.
Por Víctor Sánchez y Jaime Aguilera
-¿En qué consiste?
La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune crónico en el que el sistema inmunológico reacciona de forma anormal al gluten, una proteína presente en el trigo, la cebada y el centeno. Esta reacción provoca inflamación y daño en el intestino delgado, afectando la absorción de nutrientes.
Funciona de la siguiente manera:
-Cuando una persona celíaca consume gluten, su sistema inmunológico ataca la mucosa intestinal.
-Se produce una respuesta inflamatoria que daña las vellosidades intestinales, estructuras encargadas de la absorción de nutrientes.
-Como resultado, la absorción de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales se ve comprometida, lo que puede llevar a desnutrición y otras complicaciones.
-Causas
Los genes, combinados con el consumo de alimentos con gluten y otros factores, pueden contribuir a la enfermedad celíaca. Sin embargo, la causa exacta no se conoce. Las prácticas de alimentación infantil, las infecciones gastrointestinales y las bacterias intestinales pueden contribuir, pero estas causas no se han demostrado.
Algunas veces, la enfermedad celíaca se vuelve activa después de una cirugía, un embarazo, un parto, una infección viral o un estrés emocional grave.
Esta enfermedad se puede transmitir por la genética, de manera hereditaria aunque no es seguro que se transmita desde los progenitores a los hijos, es decir, que ellos la pueden tener pero no por ello sus hijos van a tenerla. Existe el gen portador el cual determina si puedes tener esta enfermedad o no, si tienes este gen es posible que se llegue a desarrollar sin saber exactamente cuando.
-Tratamiento
No existe un tratamiento que erradique esta enfermedad todavía, aunque se está investigando.
El único tratamiento efectivo es una dieta estricta sin gluten de por vida. Esto permite la recuperación del intestino y la desaparición de los síntomas.Las personas celíacas deben evitar trigo, cebada, centeno y sus derivados y tener cuidado con la contaminación cruzada en los alimentos.
-Síntomas
Existe una gran variabilidad en los síntomas y no siempre existen síntomas propiamente digestivos. Los síntomas que presentan los pacientes con enfermedad celíaca dependen de la deficiente absorción de los nutrientes que contiene la dieta.
Pueden referir cualquiera de los siguientes síntomas (combinados o aislados):
-Diarrea crónica.
-Pérdida de peso.
-Deposiciones abundantes, grasientas.
-Anemia inexplicada.
-Dolor abdominal recurrente.
-Gases.
-Dolores óseos y articulares.
-Calambres musculares.
-Cansancio.
-Retraso del crecimiento.
Algunas personas con enfermedad celíaca no refieren ningún síntoma (asintomáticos), porque la parte no dañada de su intestino es capaz de absorber suficientes nutrientes para prevenir los síntomas. Estos casos llevan consigo un riesgo, debido a que aunque la persona afectada no sufra ningún malestar que note, el daño en las vellosidades del intestino sigues ocurriendo, y al no presentar síntomas la enfermedad no se puede detectar de manera sencilla y por tanto, no hay un cambio en la dieta.
Cuando las personas con enfermedad celíaca consumen alimentos con gluten, su sistema inmunitario reacciona causando daño a las vellosidades intestinales. Debido a ese daño, las vellosidades son incapaces de absorber el hierro, las vitaminas y los nutrientes en forma apropiada.
Para diagnosticar esta enfermedad una vez presentados los síntomas, se puede realizar de dos formas:
-Por análisis de sangre
-Biopsia intestinal para ver el daño de la mucosa del intestino.
-Factores de riesgo
La enfermedad celíaca tiende a ser más común en personas que tienen:
-Un familiar con enfermedad celíaca o dermatitis herpetiforme.
-Diabetes tipo 1.
-Síndrome de Down, síndrome de William o síndrome de Turner.
-Enfermedad autoinmune de la tiroides.
-Colitis microscópica.
-Enfermedad de Addison.
Dermatitis herpetiforme
La intolerancia al gluten puede causar esta enfermedad de la piel que produce ampollas. El sarpullido generalmente ocurre en los codos, las rodillas, el torso, el cuero cabelludo o los glúteos. Esta afección a menudo se asocia con cambios en el revestimiento del intestino delgado idénticos a los de la enfermedad celíaca, pero la afección cutánea podría no causar síntomas digestivos.
Los profesionales de la salud tratan la dermatitis herpetiforme con una dieta sin gluten, medicamentos o ambos, para controlar el sarpullido.
-Tipos de celiaquía
La celiaquía no se manifiesta de la misma manera en todas las personas. Existen diferentes tipos de enfermedad celíaca según sus síntomas y diagnóstico:
Celiaquía clásica (sintomática)
-Es la forma más reconocida de la enfermedad.
-Los síntomas afectan principalmente el sistema digestivo.
-Síntomas principales:
Diarrea crónica o estreñimiento
Pérdida de peso
Hinchazón y dolor abdominal.
Anemia por deficiencia de hierro.
Retraso en el crecimiento en niños.
Celiaquía atípica
-No se presentan síntomas digestivos evidentes, sino síntomas extraintestinales.
-Suele diagnosticarse en la edad adulta.
-Síntomas principales:
Fatiga crónica
Osteoporosis o fracturas frecuentes
Infertilidad y abortos recurrentes
Problemas neurológicos (migrañas, ansiedad, depresión)
Erupciones cutáneas (dermatitis herpetiforme)
Celiaquía silenciosa o asintomática
-La persona no presenta síntomas evidentes.
-Se detecta por análisis de sangre o biopsia intestinal (se observa daño en las vellosidades intestinales).
-Suele descubrirse en familiares de personas celíacas o en estudios por otras enfermedades.
Celiaquía potencial
-No hay daño intestinal, pero sí predisposición genética y presencia de anticuerpos en sangre.
-Puede evolucionar a una celiaquía activa en el futuro.
Celiaquía refractaria
-Es una forma rara y grave de la enfermedad.
-Los síntomas persisten a pesar de seguir una dieta sin gluten estricta.
-Puede requerir tratamientos médicos adicionales, como corticoides o inmunosupresores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario